A la hora de viajar, nadie está exento de caer en la tentación de comprar souvenirs, ropa, tecnología, artículos de bazar, comidas y muchos etcétera. Tal es así que ya existe el turismo especializado en compras, uno de los mayores impulsores del crecimiento del sector turístico. Esta tipología está relacionada con los buenos precios o con productos de arte o tecnología avanzadas que no se encuentran en el país de origen.
Los países que reciben a este tipo de viajeros se ven beneficiados por múltiples aspectos: crecimiento económico, desestacionalización de la demanda turística, rentabilidad, posicionamiento positivo. Para lograr esta popularidad, los destinos deben asegurar la calidad de sus productos, la autenticidad de la experiencia, el valor de las ofertas y el entretenimiento.
Cómo detectar a un turista de compras
- Demanda amplitud horaria y fácil acceso a los locales de compras.
- Conoce y pide la devolución de los impuestos sobre las compras (tax free).
- Suele consumir productos de alto valor en todos los ámbitos, como cultura, salud o bienestar, además de gastronomía y entretenimiento.
- Busca productos exclusivos y autóctonos; y/o es experto en conseguir descuentos.
- Se interesa por la experiencia en comercios y locales pequeños, de autor.