A pesar de todas las experiencias extraordinarias, aprendizajes y vivencias que se obtienen en los viajes, especialmente los internacionales, no estamos exentos de riesgos al viajar. Estos riesgos están relacionados con el transporte, accidentes, quemaduras de la piel, exposición a infecciones, picaduras de insectos, alimentación, entre otros.
Recomendaciones para el niño viajero
Los niños son más vulnerables y más susceptibles que los adultos, tanto para adquirir algunas infecciones como para exponerse a algunos de los riesgos, por ejemplo a las infecciones cutáneas, mordeduras de animales, enfermedades respiratorias y diarrea aguda. Estas dos últimas son más frecuentes en niños pequeños menores a dos años de edad.
Por esta razón los viajes deben ser preparados con antelación de modo de poder tomar las medidas de prevención adecuadas, para lograr un viaje seguro. Algunas vacunas pueden requerir de varias dosis antes del viaje y algunos medicamentos de preparación de dosis especiales.
La preparación de un viaje seguro, requiere de la evaluación del niño considerando diferentes aspectos; su edad, antecedentes, estado inmunitario, el destino, tipo de viaje, duración y sus condiciones. Con estos elementos un médico especialista en medicina del viajero puede hacer las recomendaciones especiales de acuerdo al tipo de viaje y circunstancias, sobre todo cuando se trata de destinos exóticos.
Antes de incluir a un niño pequeño en un viaje que te entusiasma mucho, tené en cuenta que si el niño es pequeño, tiene ritmos regulares de alimentación, sueño y juegos, cuya ruptura puede representar más problemas que beneficios, tanto para el niño como para sus padres.
Dra. Norma Sanfeliz
Especialista en Salud Pública
MN: 63.946